Estructuras de la forma mentis escolástica en la obra abelardiana

Resumen

La forma mentis escolástica no es el capricho de algún maestro de Teología o de Artes, sino el resultado de largos procesos filosóficos y pedagógicos. Si bien es extremadamente interesante examinar cada uno de ellos, la tarea exigiría un desarrollo que excede en mucho los límites de este trabajo. En consecuencia, lo que haremos aquí será abordar algunos de los aspectos metodológicos en la obra de Pedro Abelardo, pues serán ellos los que, aunados a determinados procesos histórico-culturales, darán lugar a lo que en el siglo XIII será conocido como “la escolástica”. En efecto, el famoso Magister Palatinus ha sido considerado por no pocos historiadores como uno de los padres de la escolástica o, al menos, como un proto-escolástico. Atendiendo a estas consideraciones, entonces, la presente investigación se llevará a cabo a partir dos grandes ejes. El primero tratará de establecer los fundamentos práctico-metodológicos de la quaestio escolástica para, en un segundo momento, rastrear los aportes precisos que Abelardo ha hecho al respecto, fundamentalmente en sus obras Sic et non y Theologia Summi Boni.